La meditación es una práctica destinada a alcanzar un profundo estado de paz y tranquilidad mental. En las últimas décadas, el interés por la meditación como método para mejorar la salud ha aumentado considerablemente, lo que ha estimulado una gran cantidad de investigaciones científicas sobre sus efectos en la salud física y mental. Los resultados de estos estudios confirman que la meditación puede tener una amplia gama de efectos positivos sobre el cuerpo y la psique.
Reducción del estrés
Uno de los beneficios más conocidos de la meditación es su capacidad para reducir los niveles de estrés. Un estudio publicado en la revista Psychosomatic Medicine descubrió que la práctica regular de la meditación ayuda a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés, en la sangre. Los participantes que practicaban regularmente la meditación declararon tener menos síntomas de estrés y un mejor estado general de salud.
Mejora la calidad del sueño
La meditación puede ayudar a mejorar la calidad del sueño, acortar el tiempo que se tarda en dormirse y reducir la frecuencia de los despertares nocturnos. Un estudio publicado en JAMA Internal Medicine descubrió que la meditación de atención plena es eficaz para combatir el insomnio y mejorar la calidad del sueño.
Reducir la tensión arterial
La práctica regular de la meditación puede ayudar a reducir la tensión arterial al mejorar la función cardiovascular. Los estudios han demostrado que la meditación puede relajar los vasos sanguíneos y mejorar el flujo sanguíneo, lo que a su vez tiene un efecto beneficioso sobre la presión arterial.
Mejora de la atención y la concentración
La meditación también puede ayudar a mejorar las funciones de atención y memoria. Un estudio realizado por científicos de la Universidad de California en Santa Bárbara descubrió que los cursos de meditación ayudaban a los participantes a concentrarse mejor en las tareas y a mejorar su rendimiento en las pruebas de capacidad cognitiva.